Relato de microfilia (+18)


Estabas allí entre sábanas de colores chispeantes, la habitación era oscura y amplia, tu cuerpo desnudo se deslizaba a través de sábanas multicolores, yo....te observaba, mientras mis ojos se deleitaban con el placer de sentir cada vez más tu cuerpo, tu cuerpo tan junto al mío, mi cuerpo tan cerca del tuyo, y en ese instante me agarré fuertemente a las sábanas mientras los rayos de sol penetraban por tu ventana y hacían resplandecer y brillar mi pelo castaño mientras mi pezones se excitaban cada vez más cuando me iba acercando a ti e imaginando el placer de recorrer tu cuerpo y descansar en tu boca; el camino era duro, mi esfuerzo era constante, mis sueños se empezaban a cumplir ya estaba descansando en tu almohada y dispuesta a navegar y entremezclarme con tu pelo sedoso de color rubio dorado que los rayos de sol hacia brillar, paseé por tu pelo mi pequeño cuerpo desnudo mientras me iba desvistiendo lentamente y gustosamente al sentir algo más de ti, llegué a tus ojos, me observé, me reflejé en ellos, en aquellos ojos profundos de color azul apagado y divisé una vez más mi cuerpo, ya sólo pude sentir como tu lengua enmudecía mi pequeña vagina mientras todo mi fluido se mezclaba con tu saliva, y tu lengua empezó a recorrer todo mi cuerpo de abajo a arriba empezando por mis piernecitas, deteniéndose en mi clítoris y siguiendo por mis pezones pequeñitos y grandes al mismo tiempo, ya sólo pensé que eras tú mi gran necesidad, tus manos me sujetaban suavemente mientras yo me estremecía, cuando llegué al éxtasis noté como se estremecía también tu cuerpo, pero yo quería verlo de cerca, quería sentirlo de cerca, bajé por tu cuello y me deslicé a través de mi propio flujo vaginal el cual inundaba tu cuello, seguí recorriendo tu pecho, y tus pezones y acariciando tu vello con mis piernas hasta llegar a tu ombligo donde me detuve lamiéndolo gustosamente y fui bajando mi pequeña lengua hasta tu barriga donde podía divisarlo todo, allí comencé a masturbarme hasta llenarte de mi esencia y una vez alcanzado mi primer orgasmo comencé a bajar por tu entrepierna donde me detuve y proseguí, sentí mucho placer y noté que tú estabas sintiéndome cada vez más, allí decidí limpiarme sobre tu miembro erecto, mis piernas se abrieron mientras yo reposaba sobre él y me acariciaba el pecho, allí fuiste realmente mío cuando tu semen se disolvió sobre mi piel, y una vez allí seguí caminando entre tus piernas rodeándote los mulos y navegando entre tus rodillas....en ese momento me cogistes con las dos manos para acostarme justo a tu lado mientras me arropabas tiernamente. Saludos a todos los autores y felicidades. Meiko*

2 comentarios:

dgrayson dijo...

hola meiko la verdad me pusiste la piel chinita con esta entrada ....lno pierdas esta linea , es lo tuyo y eres la mejor saludos y felicidades nuevamente. dgrayson

Meiko dijo...

Gracias...jejeje...bueno en fin también tengo mi lado sentimental ya lo expondré :D xauuu^ nos leemos :)