Poema al amor de mi vida: Edu*

Te seguiría amando entre sábanas blancas,

despertaría acariciando tu pecho desnudo,

y enredada en pedazos de ti,

mientras mis pupilas se mantienen intactas observándote.

Te seguiría amando entre caricias de placer,

despertaría escuchando el latir de tu corazón,

y enredada en tu cabello,

mientras tus pupilas se mantienen intactas observándome.

Sólo me apetece amarte,

amarte tan intensamente

que no tenga fuerzas para otra cosa.

Sólo me apetece acariciar tu cuerpo desnudo,

y fundir dentro de él mi alma, mi corazón y mi mente,

ya no me queda más sitio para guardar sentimientos.

Sólo quisiera que pronunciaras mi nombre por dentro,

y por fuera, ser la razón de tus alegrías,

y la razón de tus penas.

Rózame el corazón y tócame el alma,

justo allí estará mi cuerpo esperando al tuyo,

te deseo tanto como te amo,

te amo tanto como te deseo.

Te seguiría queriendo entre sábanas rojas,

despertaría acariciando todas las partes de tu cuerpo,

y enredada en tu alma me fundiría,

mientras mis besos se mezclan con tu saliva.

Te seguiría queriendo entre abrazos desnudos,

despertaría acariciando toda tú alma blanca,

y enredada en tu mente me dormiría,

mientras tus besos se mezclan con mi saliva.

Sólo quiero que me quieras,

tan intensamente,

que no tengas fuerza para otra cosa.

Sólo quiero que acaricies mi cuerpo desnudo,

y fundir dentro de él tu corazón, tu alma y tu mente,

y que no tengas más sitios donde guardar sentimientos.

Sólo me limitaré a pronunciar tu nombre por dentro,

y por fuera, que seas la razón de mis alegrías,

y la razón de mis penas.

Te rozaré el corazón, te tocaré el alma,

justo allí estará tu cuerpo esperando al mío,

y que me desees tanto como me quieres,

y que me quieras tanto como me deseas.

Y así comenzaría a desearte,

y tú comenzarías a desearme,

y yo te seguiría queriendo toda nuestra vida,

te seguiría amando toda mi vida,

y tú me seguirías queriendo toda nuestra vida,

me seguirías amando toda tu vida.

Dedicada a mi amor, mi niño, mi cielo...mi vida, mi noche y mi día, mi Eduardo.

Te quiero, te amo y te deseo...Tu Meiko*

No hay comentarios.: